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martes, 24 de septiembre de 2013

Tiempos de terror. Apocalipsis 8-9.

Dios hizo el mundo para que el hombre viviera feliz, para que tuviera tiempos maravillosos.
Todo lo que Dios diseño fue hecho con ese propósito. Juan tuvo una visión de lo que sería el fin del mundo pero no porque Dios quiera destruirlo, Dios no iba hacer algo tan hermoso para después destruirlo, usted no tardaría años y le dedicaría tanto amor en construir algo sabiendo que después lo va a destruir.
En apocalipsis Juan tiene una revelación de lo que sucedería en miles de años después, es natural que él no comprendiera muy bien lo que estaba viendo.
Para muchos estudiosos lo que Juan estaba viendo no eran monstruos voladores, probablemente eran grandes naves, potentes aviones de guerra.
La palabra de Dios dice que en los últimos tiempos la ciencia aumentara considerablemente. Daniel 12: 4 “Pero tú, Daniel, cierra las palabras y sella el libro hasta el tiempo del fin. Muchos correrán de aquí para allá, y la ciencia se aumentará.
El colmo del aumento de la ciencia es que a pesar de que el hombre desarrollara su máximo nivel de inteligencia también vivirá en oscuridad. Apocalipsis 8: 12 “El cuarto ángel tocó la trompeta, y fue herida la tercera parte del sol, y la tercera parte de la luna, y la tercera parte de las estrellas, para que se oscureciese la tercera parte de ellos, y no hubiese luz en la tercera parte del día, y asimismo de la noche
El mismo hombre hará que los últimos días sean como ajenjo, amargos e insoportables. 8: 11 “Y el nombre de la estrella es Ajenjo. Y la tercera parte de las aguas se convirtió en ajenjo; y muchos hombres murieron a causa de esas aguas, porque se hicieron amargas
Los días definitivamente serán días de gran confusión, la oscuridad causa asombro pero la oscuridad producto del humo causa desesperación y dolor.  Apocalipsis 9: 2 “Y abrió el pozo del abismo, y subió humo del pozo como humo de un gran horno; y se oscureció el sol y el aire por el humo del pozo.
En verdad que la visión de Juan causaría terror a cualquiera. 9: 7-9 “El aspecto de las langostas era semejante a caballos preparados para la guerra; en las cabezas tenían como coronas de oro; sus caras eran como caras humanas;  9:8 tenían cabello como cabello de mujer; sus dientes eran como de leones; 9:9 tenían corazas como corazas de hierro; el ruido de sus alas era como el estruendo de muchos carros de caballos corriendo a la batalla;
La destrucción del hombre es eminente pero no porque Dios quiera hacerlo, será el mismo hombre quien se destruirá, la ciencia aumentara unos serán los reconocidos como inteligentes pero por cada persona que invente cosas para la comodidad del hombre muchos serán cada vez menos inteligentes y mas mediocres. 9: 15 “Y fueron desatados los cuatro ángeles que estaban preparados para la hora, día, mes y año, a fin de matar a la tercera parte de los hombres
El internet es un invento maravilloso el problema es que muchas personas se han olvidado de leer, de investigar ahora todo lo solucionan con un simple Click. Con un tan solo copiar y pegar ya han hecho su trabajo.
En la parte laboral unos son los genios e inteligentes que inventan grandes maquinarias pero muchos son los desplazados laboralmente. Lo que varios hombres hacían en una hora, las maquinas lo hacen en unos minutos. Muchos empleados remplazados por un solo operario.
Llagara el momento donde muchos anhelaran morir. 9: 6 “Y en aquellos días los hombres buscarán la muerte, pero no la hallarán; y ansiarán morir, pero la muerte huirá de ellos
Jesucristo no quiere que esto suceda de esta forma es por eso que desde un principio ha levantado trompetas voces que anuncien lo que va a pasar, voces que enseñen las verdades de Dios, muchas personas han sido utilizadas por Jehová Dios: profetas, sacerdotes, pastores. Etc. 8: 2 “Y vi a los siete ángeles que estaban en pie ante Dios; y se les dieron siete trompetas
El problema es que seguirá pasando lo que por muchos años ha pasado el hombre sigue endureciendo su corazón e insiste en creer en Dios pero a su manera. 9: 20 “Y los otros hombres que no fueron muertos con estas plagas, ni aun así se arrepintieron de las obras de sus manos, ni dejaron de adorar a los demonios, y a las imágenes de oro, de plata, de bronce, de piedra y de madera, las cuales no pueden ver, ni oír, ni andar;
Los tiempos cada vez son difíciles la única forma de soportarlos y vivir tal como Dios quiere es a través de Jesucristo. Solo con Jesucristo en nuestro corazón podemos vivir en un paraíso en medio de un mundo malvado.




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